El ritual de la mañana es una de esas cosas que uno lee que la “gente exitosa” hace. La gente “organizada” y que “sí tiene tiempo”.
Pero si me has seguido este año, sabrás que he puesto un gran énfasis en el autocuidado y la vida personal, no solo en mi contenido, sino en mis imprimibles también.
Y esto ha sido porque una condición de salud me ha llevado a que aquello que tenía en mi cabeza como teoría, realmente se volviera vivencial.
Y es curioso, porque la vida se encarga de enviarte las experiencias que más necesitas para aprender lo que más necesitas aprender.
No tiene sentido que yo le esté diciendo a mis estudiantes Esencialistas que deben incluir prácticas de autocuidado en su planeación diaria, si yo misma no lo estoy haciendo, ¿cierto?
¿De qué sirven el método más efectivo y la app más avanzada si no tienes energía en tu día a día, si tu salud se deteriora y tus relaciones son prácticamente inexistentes, especialmente la relación contigo mismo?
Por ahora quiero dejarte con tres ideas claves:
¿Qué es un ritual?
Apartándonos un poco de la obvia definición religiosa, para mí un ritual es una serie de actividades o pasos que una persona ejecuta repetidamente, con el fin de lograr un objetivo con el mínimo esfuerzo posible.
Resulta que tomar decisiones requiere energía, bastante energía de hecho.
¿No te ha pasado que sales con tu pareja a comer y le preguntas “¿A dónde quieres ir? ¿Qué se te antoja comer?” y tu pareja te contesta “No sé, me da igual, donde tú quieras” y a ti como que te hierve la sangre?
Es porque ambos están evadiendo el gasto de energía de tener que decidir a qué restaurante ir.
Bueno, cuando tú estableces un ritual, es decir, una serie de pasos o actividades que siempre haces en el mismo orden o a la misma hora del día, logras un gran resultado con un mínimo gasto de energía, porque las decisiones ya las has tomado de antemano.
El ritual de la mañana es la clave para para iniciar tu día con energía
Las primeras horas de la mañana son un espacio muy propicio para establecer rituales que te den la mayor oportunidad de iniciar tu día con el combustible suficiente para cumplir con todos tus pendientes. 
Como ya lo he hablado antes (y lo recalco en mi ponencia) para mí hay tres áreas del autocuidado que son indispensables: cuerpo, mente y espíritu… y hay una cuarta, que aunque no es como tal de autocuidado, es de vital importancia en tu vida: tus relaciones.
Así que ese ritual de la mañana debería en lo posible integrar prácticas dirigidas a alimentar algunas de esas áreas.
Ciertamente al hablar del cuerpo, la alimentación y la actividad física deben ser incluidos y son de suma importancia al empezar el día; y luego, algún tipo de práctica espiritual o lectura para tu espíritu o tu mente y finalmente de alguna manera incluir en lo posible unos minutos para esa conexión con tus seres queridos.
Como lo expreso en mi ponencia, no es necesario lanzarse a tratar de implementar 14 prácticas todas al mismo tiempo, sino más bien elegir una (por ejemplo dormir un poco más), practicarla y poco a poco ir introduciendo otras, según lo que necesites para acercarte a ese sentimiento de balance y energía que todos buscamos.
¿Qué es el balance?
La idea de “balance” es súper personal. El problema es que la mayoría de nosotros no se ha tomado el tiempo para definirlo, para establecer una idea de cómo luce el balance en tu vida.
Y aunque es un tema controvertido porque algunos expertos afirman que el balance no existe. Yo más bien tiendo a pensar que es una idea que evoluciona contigo y que es dinámica. Hoy luce de cierta manera y mañana puede lucir de otra.
Entonces, ¿específicamente qué actividades te acercarían más a un sentimiento de balance hoy en tu vida?
Diseñar tu ritual
El Imprimible del Mes es el Planeador de Rituales, en el que podrás comenzar a darle forma a ese ritual que deseas implementar al iniciar tu día.
Podrás establecer un presupuesto de tiempo que te permita decidir si es realmente viable introducir todas las actividades que quieres implementar en tu ritual de la mañana.
Ya sé que no tienes tiempo, que apenas alcanzas a sacar a los niños al colegio y a salir corriendo para la oficina con el maquillaje a medias. Pero todo viaje empieza con el primer paso y con tu deseo de cambiar. Y la ponencia y el imprimible te van a ayudar a tomar decisiones que se ajusten a tu situación particular.
Puedes acceder al Imprimible registrándote gratis aquí o en el botón debajo de la imagen.
Ahora es tu turno
Ve a los comentarios y dinos: ¿Cuál es la primera actividad que quieres implementar en tu ritual de la mañana y para cuándo te comprometer a iniciar?
¡Cuéntale a tus amigos!
El ritual de la mañana y el “balance” @SerEsencialista
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