¿Cómo planear tus vacaciones? ¿Se enloqueció Carolina? ¿No era este un sitio sobre administración del tiempo?
Bueno, sí… Y, uno de los temas claves, importantísimos de la productividad, y en general de la búsqueda de la felicidad en el momento presente, es el descanso.
Pero, antes de continuar, quiero confesarte algo: Estoy escribiendo esta miniLección varios días antes de su publicación y la programaré para que salga al aire mientras estoy de vacaciones.
Por eso pensé que sería muy oportuno compartirte un poco de mi proceso para crear experiencias que no solo me ayudan a descansar, sino que elevan mi espíritu y mi mente con nuevos aprendizajes.
Descansar es indispensable
Sí, seguramente esto lo has oído hasta el cansancio, porque siempre se lo repiten a uno. Pero qué difícil que es bajar la marcha cuando tienes mil cosas pendientes e incendios constantes, ¿no?
Muchos de nosotros pensamos “descansaré cuando…”
Salga de este proyecto.
Mis hijos estén más grandes.
Haya ahorrado X cantidad de dinero.
Haya completado todos los ítems de mi lista de tareas.
La verdad es que con frecuencia si no hemos programado el descanso, el descanso no sucede 
Y —seguramente esto también lo has oído— si no hay descanso, te quemas.
Tarde o temprano, terminas quemándote, sintiéndote agotado, abrumado, exhausto y a punto de rendirte.
Lo que creerías que solo te afecta a ti (principalmente tu salud física y emocional), en realidad también afecta a tus familia y amigos. Afecta todos los aspectos de tu vida.
Programar proactivamente tu descanso te permite recargarte de energía, sincronizar de nuevo el motor y regresar a tus labores con una visión fresca.
Descansar te abre la mente y te permite ver muchas más posibilidades. En otras palabras, alimenta tu creatividad para que propongas soluciones creativas en tus proyectos laborales.
Y yo sé que para algunos lo que voy a decir es un poco loco: Las vacaciones hay que planearlas con meses de anticipación.
Ahora, yo sé que todos somos diferentes y tenemos distintos estilos de viaje (tal como distintos estilos de productividad) y no todos queremos ser tan ñoños de planear tanto.
Pero en mi experiencia, los viajes son mucho más ricos y más satisfactorios cuando me he tomado el tiempo de planearlos a cabalidad. Esa soy yo.
Redefiniendo el descanso
Sí, sabemos que debemos descansar, pero ¿qué es “descansar” para ti? ¿Cómo luce un día de descanso?
El descanso es inherente a cada persona, depende de su estilo, de sus intereses, de su personalidad, de sus pasiones.
Para mí descansar es cambiar de actividad, de ambiente, estar en un sitio completamente diferente, haciendo algo que no hago todos los días.
Esto puede ser desde ir a la casa de campo de mis papás a acostarme en una hamaca y ver pasar el día (literalmente no hacer nada), como hacer un viaje al otro lado del Atlántico, con varios destinos y planes.
Pero para ti puede ser algo muy diferente; puede ser simplemente ver películas en casa o salir a caminar con tu perro. Puede ser un retiro espiritual de una semana o un par de días en un spa de lujo.
Puede ser hacer turismo en tu ciudad o encerrarte en una cabaña con todos los libros a los que no les has sacado el tiempo. O un fin de semana en la playa, tostándote al sol.
Así que antes que cualquier cosa, ¿qué es para ti descansar?
Teniendo esta idea clara, podemos entrar en materia y ver paso a paso cómo planear tus vacaciones.
¿Cómo planear tus vacaciones?
A mi me fascina viajar. Una vez que hice ese primer viaje, me di cuenta de qué tanto cambia la visión que uno tiene del mundo. No se es el mismo después de un viaje a otra cultura.
Por eso para mí el descanso máximo es viajar. Dependiendo de tus ambiciones de viaje, planear tus vacaciones puede ser más sencillo o más complejo.
En todo caso, muchos desperdician la experiencia por no conocer un proceso que guíe la planeación efectiva.
Después de haber sido bendecida con la posibilidad de viajar varias veces, este es el proceso que yo uso:
Paso 1: Crea tu lista de destinos deseados
Como siempre, lo primero es crear esa visión de qué es lo que quieres experimentar y/o qué sitios quieres visitar.
Hazte preguntas como:
- ¿Qué me emociona? (Arte, naturaleza, comida, ciencia, historia, etc)
- ¿Qué eventos de la historia me intrigan?
- ¿Qué historias me inspiran?
- ¿Qué tipo de experiencia quiero tener? ¿Algo calmado y retirado? ¿O el corre-corre de la gran ciudad?
- ¿Qué clase de personas encuentro fascinantes?
- ¿Qué clase de comidas quiero probar?
Toma acción: Reflexionando sobre estas preguntas, comienza a hacer una lista de posibles destinos que te proporcionarían las experiencias que quieres tener.
Paso 2: Define el tiempo disponible
El tiempo es el elemento más valioso cuando se trata de los viajes, incluso por encima del dinero
Algunos expertos recomiendan tomar varias vacaciones al año, más cortas. Es decir, viajes de una semana, dos o tres veces al año, en lugar de tomarlos una sola vez.
Lo recomiendan porque así te programas para descansar varias veces al año, con los beneficios que ello proporciona, pero además porque te permite traer energía renovada a tu trabajo, con más frecuencia.
Por otro lado, comprar pasajes de avión y realizar reservas de hotel con suficiente antelación (de 6 a 4 meses antes de la fecha de viaje) te ofrece los mejores precios.
Asimismo, hay atracciones que es necesario reservar meses antes, para asegurarse un lugar para visitarlas, como por ejemplo Machu Picchu o la Necrópolis Vaticanam cuyas entradas se agotan meses antes de la fecha de visita.
También es bueno considerar las estaciones (invierno, verano) o las temporadas (alta o baja) óptimas para visitar ciertos destinos, de acuerdo con la experiencia que quieres tener.
O tomar en cuenta festividades como Navidad o algún festival en particular al que quieras asistir.
Toma acción: Decide el tiempo que vas a destinar a tus vacaciones, planea con suficiente antelación y recuerda viajar con una mentalidad de abundancia: Siempre podrás volver.
Paso 3: Define tu presupuesto
Evidentemente viajar cuesta dinero, pero con planeación adecuada, ¡es mucho lo que te puedes ahorrar y mucho lo que puedes disfrutar!
Básicamente hay siete categorías de gastos de viaje:
- Papeleo: Visa, vacunas, impuestos, seguro de viaje, licencia de conducción internacional, etc.
- Transporte: Tiquetes aéreos, buses, metro, taxis, alquiler de auto o bicicleta, gasolina, seguros, parqueaderos, etc
- Hospedaje: Hotel, hostal, alquiler de apartamento, etc.
- Alimentación: Desayuno, almuerzo, cena, snacks, agua, etc.
- Atracciones: Todas las entradas a los sitios que vas a visitar o los tours que tomarás o las experiencias que vas a tener.
- Compras: Es bueno divertirse con las compras, siempre que no te excedas. Recuerda: Todo lo que compres lo debes llevar de regreso a tu casa.
- Imprevistos: No olvides llevar algo de dinero para cualquier cosa que se presente sin previo aviso.
Toma acción: Revisa tus finanzas y haz un presupuesto preliminar de gastos, ayudándote con unas búsquedas iniciales en Google.
Paso 4: Toma decisiones
Sabiendo a dónde quisieras ir, de cuánto tiempo dispones y cuál es tu presupuesto de gastos, comienza a decidir de manera realista a dónde quieres viajar esta vez.
Pregúntate:
- ¿En este momento cuál sería el lugar más fantástico que podría visitar?
- ¿En este momento qué necesitan mi cuerpo, mi mente y mi alma para renovarse?
Digamos que (por ejemplo) tu sueño es conocer algunas de las grandes capitales de Europa. Según el tiempo y dinero disponibles, ¿qué ciudades puedes visitar? ¿O tal vez solo visitarás una? ¿Cómo podrás distribuir tu tiempo de la manera más efectiva posible, sin afanes y sin atosigarte de actividades?
Toma acción: Decide qué países, ciudades o poblaciones vas a visitar y cuántos días estarás en cada sitio.
Paso 5: Define atracciones
Una vez has decidido el país o ciudad que quieres visitar, es momento de hacerte una idea de las atracciones que quieres visitar.
Haz una búsqueda en Google sobre las principales atracciones en esa ciudad y elige las que más te llamen la atención.
Revisa la lista de atracciones y asígnales una calificación así:
- Debo verla, si no, el viaje ha sido perdido.
- Sería muy bueno verla.
- Si la puedo ver, bien, si no, será en el próximo viaje.
Y luego hazte estas preguntas:
- ¿Cuál es el valor de esta atracción para la cultura/historia/naturaleza?
- ¿Qué tan divertida o hermosa o significativa es esta experiencia?
- ¿Qué tan lejos queda de donde me estaré hospedando?
- ¿Qué tan costoso es visitarla?
- ¿Qué tan grande es? ¿La puedo visitar en un solo día?
Toma acción: Una vez tengas una lista tentativa de las atracciones que quieres visitar, da una búsqueda en Google en el sitio web de cada una, para averiguar horarios, días de funcionamiento y cierre y ubicación.
Paso 6: Crea tu plan en una hoja de cálculo
Ok, ok, yo soy bastante ñoña y me gustan las hojas de cálculo, pero si no te gustan, no importa. La idea es tener un sitio centralizado para registrar tu plan. Puede ser incluso en papel y lápiz.
Revisa tu lista del paso 5 y organiza geográficamente lo que vas a visitar cada día. Es decir, agrupa atracciones según las que queden más cerca unas de otras.
Yo lo hago así, porque es más efectivo desde el punto de vista del tiempo y transporte.
Sin embargo, si realizar la visita así no tiene sentido para ti porque tu visita es temática, o es más relajada, organiza tu día honrando tus gustos e intereses.
Toma acción: Ve a tu calendario y registra, ya con días y horas específicos, cada una de las actividades que has elegido.
Tener la visión de todo el calendario, a veces cambia la perspectiva que tenemos y nos ayuda a ajustar el plan y tomar decisiones diferentes.
Trata de no ser tan rígido con tu plan, date espacio para los imprevistos y deja algo de tiempo flexible simplemente para caminar y explorar la ciudad o el sitio que estás visitando.
Paso 7: Realiza reservaciones y compras
Toma acción: Una vez que tienes tu plan claro, es el momento de terminar de consolidar los costos, comprar tus pasajes, transportes, entradas y hacer las reservaciones de hotel y atracciones.
Aunque esta es una miniLección un poco diferente, quiero invitarte a que uses estos siete pasos y hagas un alto en el camino para programar ese descanso que tanto necesitas. No esperes más y ¡hazlo hoy!
Algunos dicen que lo que no se programa (en el calendario) no se hace y cuando se trata del descanso, definitivamente creo que programarlo es la mejor estrategia.
Si la administración consciente del tiempo nos ayuda a vivir el momento presente, haz que tu momento presente se enriquezca con nuevas experiencias y nuevas culturas.
Como lo enseño en mi curso gratis, detenerte a pensar qué es lo que hace que te sientas vivo y destinar tiempo para hacerlo realidad, es una inversión en ti mismo y un beneficio para quienes te rodean y para tu trabajo.
Ahora es tu turno
Cuéntanos en los comentarios, ¿cuál es ese destino soñado que quieres visitar? Y dinos ¿en cuánto tiempo planeas hacer realidad ese sueño?
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Cómo planear tus vacaciones en 7 pasos increíblemente sencillos @SerEsencialista
Con frecuencia si no hemos programado el descanso, el descanso no sucede @SerEsencialista
¿Qué es “descansar” para ti? ¿Cómo luce un día de descanso? @SerEsencialista
Muchas Gracias por compartir, para tomarlo en cuenta en nuestras vacaciones tan esperadas.