Suena contradictorio y hasta ridículo… pero lo cierto es que a mí aún me pasa. Me refiero al sentimiento de no poder descansar sin culpa.
En mi caso se siente como desasosiego, como ansiedad… o como decimos en Colombia: “Como que no me hallo”. Como si me faltara algo. Como que estoy aquí, pero “debería” estar allá.
Como si no hacer nada estuviera mal y fuera algo reprochable. Un pecado. ¿Te pasa parecido?
Lo curioso del asunto es que mis prácticas de crecimiento personal y espiritual me han ayudado a hacerme consciente de estos pensamientos.
Dicho de otra forma, soy capaz de darme cuenta de que cuando estoy descansando ocurren pensamientos de culpa en mi mente. De que “debería” estar haciendo algo “productivo”.
Y luego recuerdo que es simplemente la adicción de mi mente a la energía negativa. A generar pensamientos que me causen angustia, miedo y, más específicamente en este caso, culpa.
Y al darme cuenta, me es posible introducir la Pausa Consciente (un espacio entre mi pensamiento negativo y mi reacción ante ese pensamiento negativo) y deliberada e intencionalmente salir de esa culpa.
Sin embargo para muchas personas este estado mental se siente “normal”. Lo sé porque yo también era así.
Pero déjame preguntarte algo: Digamos que te compraste un carro/automóvil/coche.
¿Esperarías que funcione sin gasolina, agua y aceite? (O sin energía si es eléctrico).
¿Cuál sería la vida útil de ese carro si estuvieras manejándolo 12, 14 o 16 horas al día?
Si tenemos reverencia por nuestros carros, ¿por qué pareciera que no es razonable tener reverencia y respeto por nuestros cuerpos y nuestro estado mental?
Lo bueno es que hay tácticas específicas que todos podemos aplicar para que descansar sin culpa sea una realidad. Algunas tienen que ver con entender por qué descansar nos genera culpa. Pero hay otras súper prácticas (e inesperadas) que puedes aplicar desde ya para que descansar sea natural, placentero y libre de auto-recriminación.
¿Cómo descansar sin culpa cuando no alcanza el tiempo?
Aprenderás
– 3 pensamientos tóxicos que te impiden descansar intencionalmente.
– El aspecto inesperado que debes trabajar para descansar efectivamente.
– 5 pasos para asegurarte un descanso que maximice tus resultados.
Y finalmente quiero dejarte estos cuatro preceptos para que los escribas en un cartel y lo pegues en la pared de tu oficina, o en tu nevera o en el sitio de tu casa donde lo veas con más frecuencia.
Descansar es generoso → Tienes más para dar.
Descansar es efectivo → Hace que las tareas tomen menos tiempo.
Descansar es creativo → Hace que se te ocurran mejores ideas.
Descansar es saludable → Es el mantenimiento para la máquina.
¡Que no se nos (a ti y a mí) olvide!
Ahora es tu turno…
La próxima semana practica lo siguiente:
➀ Consigue cuaderno, libreta, agenda, diario o app de notas.
➁ Identifica tus pensamientos sobre el descanso y cuestiónalos.
➂ Define qué es “descanso”. (Dormir, siestas, libro, meditación, journaling, música suave, café ventana, llamada con amiga).
➃ Establece una frecuencia de descansos razonable. Así sea poquito, que sea consistente y diario.
➄ Bloquéalo en el calendario.
Recursos mencionados en este video:
☛ LISTA DE ESPERA Haz Menos ⋆ Logra Más — Alcanza tus metas planeando tus días (Entrenamiento online)
Y si te quitó la culpa, ¡compártelo! ⤵︎